Alphabet anuncia Tidal, proyecto para hacer sustentables los océanos
La División X de Alphabet, filial de Google, anunció la creación de Tidal, un proyecto de Moonshot Factory con el objetivo de preservar la capacidad de los océano para sostener la vida y ayudar a alimentar a la humanidad de manera sostenible.
El objetivo inicial de Tidal es desarrollar tecnologías que permitan comprender mejor lo que sucede bajo el agua, con un enfoque en ayudar a los acuicultores a manejar y hacer crecer sus operaciones de manera respetuosa con el medio ambiente.
“La humanidad está empujando al océano más allá de su punto de ruptura, pero no podemos proteger lo que no entendemos”, afirmó el gerente general de Tidal, Neil Davé.
Para lograr su objetivo inicial, Tidal desarrolló un sistema de cámara subacuática con visión por computadora y otras técnicas de inteligencia artificial para rastrear y monitorear individualmente a miles de peces, a medida que se desarrollan.
Los componentes eléctricos tuvieron que adaptarse para resistir fríos extremos y las presiones aplastantes del ambiente de agua salada del océano.
El sistema también puede interpretar comportamientos no visibles para los acuicultores.
Al registrar el comportamiento alimentario y los datos ambientales como la temperatura y los niveles de oxígeno, se pueden tomar decisiones más inteligentes para administrar los corrales, según Davé.
El proyecto ha estado en funciones por tres años, según un informe del Financial Times, con cámaras Tidal desplegadas en Europa y Asia para ayudar a rastrear especies como el salmón y el rabo amarillo.
“Puede haber una oportunidad para aliviar la presión sobre la pesca, si hacemos que la acuicultura sea muy atractiva desde una perspectiva operativa y ambiental”, aseguró Davé.
“Los peces tienen una baja huella de carbono en relación con otras fuentes de proteína animal y desempeñan un papel fundamental en la alimentación de tres mil millones de personas en la actualidad, por lo que ayudar a los acuicultores podría ser crítico tanto para la humanidad como para la salud de los océanos”, agregó.
En este sentido añadió que “qunque cubre el 70% del planeta, la mayor parte del océano permanece sin explorar, por lo que sabemos más de la superficie de la luna que sobre las partes más profundas de los mares”.
Esto se debe a que es un entorno desafiante para la tecnología, porque la comunicación es extremadamente difícil, ya que el GPS y el WiFi no funcionan bajo el agua y el agua salada mata la electrónica, lo que dificulta el monitoreo a largo plazo.
“Nuestro software puede rastrear y monitorear miles de peces individuales a lo largo del tiempo, observar y registrar los comportamientos de los peces, como comer, y recopilar información ambiental como la temperatura y los niveles de oxígeno, información que brinda la capacidad de rastrear la salud de los peces y tomar decisiones más inteligentes”, finalizó Davé.
Fuente: Forbes
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