La forma sorprendentemente simple de hacer que los envases sean más sostenibles
Hay una manera sorprendentemente simple de hacer que los envases sean más sostenibles.
Los productos de limpieza de hogar tienen una importante huella de carbono. Varias empresas nuevas quieren popularizar una solución inteligente: eliminar el agua.
El limpiador de ventanas, el jabón para lavar platos, tienen una cosa en común: el agua es su ingrediente principal. Hasta ahora, pocos consumidores pensaron que esto era un problema.
Pero a medida que un número cada vez mayor de personas se da cuenta del cambio climático y la contaminación plástica, es cada vez más difícil hacer caso omiso del enorme impacto ambiental de los productos cotidianos. Te decimos cómo hacer que los envases sean más sostenibles.
Hacer que los envases sean más sostenibles: caso Full Circle
«Básicamente, estamos enviando agua a todo el país», dice Heather Kauffman, cofundadora y directora de operaciones de Full Circle, que vigila la industria de productos de limpieza del hogar ya que su compañía crea productos complementarios, como cepillos para platos y esponjas.
“El agua es algo que todos tenemos disponible en casa.
Si piensas en las emisiones de carbono requeridas para enviar botellas en gran parte llenas de agua del fabricante al minorista y luego a la casa del consumidor, te darías cuenta que es un problema».
Luego está la cuestión de los envases de plástico.
Un estudio en la revista científica Nature encontró que al ritmo actual de producción, la industria global de los plásticos contribuirá a un 15% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero para el año 2050.
Según Euromonitor, la industria del cuidado del hogar generó 29.5 mil millones de contenedores de plástico en 2015.
Mientras que la industria del cuidado personal generó 60 mil millones de unidades. Eso se traduce en 8.9 millones de toneladas de plástico generado por ambas industrias, y solo un pequeño porcentaje de eso fue reciclado.
La gran mayoría terminó en un vertedero, o peor, en el océano, donde podrían ser consumidos por animales marinos y terminar en nuestros alimentos.
Según Jaqueline Savitz, directora de políticas de Oceana, una organización comprometida con el salvamento de los océanos, los impactos del ciclo de vida del plástico en el clima son importantes, sus impactos en la salud de la vida marina y la salud humana son igualmente importantes.
La investigación muestra que debemos tomar medidas drásticas para reducir nuestro consumo de plástico, y esto incluye los productos que están en los hogares.
Sanders Defruyt, líder de la nueva economía de los plásticos en la Fundación Ellen MacArthur, que se enfoca en hacer que la economía sea más circular dijo que necesitamos repensar totalmente los productos para enfocarnos en los envases reutilizables.
Eso significa que hay que hacer que los envases sean más sostenibles.
Manera de hacer que los envases sean más sostenibles
Una forma sorprendentemente simple de abordar todos estos problemas y hacer que los envases sean más sostenibles es retirando el agua.
Varias compañías han encontrado una manera de hacer precisamente eso, hacer que los envases sean más sostenibles, estimulando una pequeña pero creciente revolución de diseño en la industria de bienes de consumo empaquetados.
La revolución de la tableta
La marca de comercio electrónico dirigida al consumidor llamada Blueland lanzó con un conjunto de productos de limpieza que vienen en forma de tabletas pequeñas, que el cliente mezcla con agua en el hogar.
Blueland lanzó un kit inicial de 29 dólares que viene con tres botellas de aerosol acrílicas que están diseñadas para durar para siempre, junto con tres tabletas que se mezclan con agua para crear limpiadores de superficies múltiples, baños y ventanas.
Cuando necesitas una recarga, simplemente ordena nuevas tabletas, que cuestan 2 dólares por barril. En los próximos meses, la empresa lanzará otros productos de limpieza y cuidado personal sostenibles.
«Mucha gente ve productos sostenibles en el mercado y automáticamente asume que va a ser más laborioso, más caro y mucho menos efectivo», dijo Sarah Paiji, fundadora de Blueland.
Hacer que los envases sean más sostenibles: el proceso
“Nuestro objetivo es disipar todas estas ideas mediante el diseño de productos que sean más fáciles de usar, más económicos y más eficaces.
Cuando pones una tableta nueva en la botella, ni siquiera necesitas agitarla, ya que se disuelve por sí sola».
Puede parecer que sería fácil comprimir un líquido en una tableta pequeña que se disolvería en agua, pero no lo es. Paiji ha pasado los últimos dos años en I + D continua para crear tabletas de Blueland.
El primer paso fue desarrollar la fórmula. Blueland tiene un laboratorio en Montana donde los científicos han estado trabajando para garantizar que la versión en tabletas del producto de limpieza sea tan efectiva como la versión líquida.
Muchos ingredientes en productos de limpieza no vienen en forma sólida.
Por ejemplo las fragancias: tanto los aceites esenciales como las sintéticas vienen en forma líquida, por lo que fue difícil comprimirlas.
Al final, el laboratorio encontró una manera de encapsular la fragancia en sílice.
Según Paiji, cuando se expone al agua, florece y libera la fragancia.
Luego estaba el tema de los contaminantes.
Paiji creía que era importante para los consumidores poder usar agua del grifo, en lugar de agua filtrada o embotellada, para que el proceso sea lo más fácil posible.
Pero la calidad del agua del grifo varía en todo el país, y la contaminación también puede ocurrir cuando el cliente agrega agua a la botella.
Por lo tanto, era crucial que la fórmula de la tableta tuviera un conservante que eliminara cualquier crecimiento bacteriano.
Si hay bacterias en el agua y se asientan en una botella durante dos años, las cosas crecerán.
Blueland quería tener un método 100% infalible, así que tuvo que desarrollar un método preservativo único.
Al final, Paiji y su equipo creen que lograron la fórmula, que actualmente tiene 12 patentes pendientes.
En varios estudios dirigidos por la EPA, los sprays de Blueland superaron a Windex y Method, eliminando más suciedad y rayas con cada barrido.
Cuando se trata de fabricar las tabletas, dado que este es un enfoque relativamente nuevo para los productos de limpieza, Paiji buscó en el mercado un proveedor, visitando a 50 fabricantes que fabrican productos de tamaño comprimido, que van desde detergentes para ropa hasta medicamentos, antes de encontrar el ajuste correcto.
Paiji descubrió que muchos clientes, especialmente las madres, no querían una botella de vidrio porque era frágil.
El aluminio también se había acabado porque muchos consumidores querían ver cómo la tableta destellaba en la botella y ver el líquido final.
Paiji finalmente se decidió por el acrílico, un plástico transparente que es completamente reciclable.
Crearon la primera botella de platino certificada por Cradle to Cradle, que rastrea la reutilización de los productos, así como sus huellas de carbono y agua.
Hacer que los envases sean más sostenibles – otros ejemplos
Otras marcas que reemplazan los productos líquidos con tabletas, como Dazz y Bottle Bright que hacen aerosoles para la limpieza de tabletas.
Hoy en día, incluso las marcas ecológicas siguen utilizando recipientes de plástico desechables y crean productos en forma fluida.
Por ejemplo, Seventh Generation fabrica detergentes líquidos concentrados para la ropa, lo que significa que la botella durará más, y Grove vende recambios para jabón para platos en bolsas de plástico que usan 60% menos de plástico que una botella del mismo tamaño.
Pero las tabletas son libres de plástico y radicalmente más ligeras, lo que significa un ahorro significativo en las emisiones de envío.
Empresas como Bite ofrecen pasta de dientes en forma de tabletas.
Pero, ¿qué se necesita para que las tabletas se adopten más en las industrias de limpieza y cuidado personal?
Según Defruyt, de la Fundación Ellen MacArthur se necesita convencer que este es un esfuerzo que vale la pena. Y para hacer eso, debemos dejar claro que esto podría ser bueno para los negocios, no solo para el planeta.
En este momento, la Fundación Ellen MacArthur se compromete a demostrar que los envases reutilizables pueden ser más rentables para una empresa.
Por ejemplo, cuando un cliente invierte en comprar una botella reutilizable de una marca, está más inclinado a volver a esa marca para reabastecerse, lo que podría impulsar la lealtad de la marca.
También hay posibilidades interesantes para crear botellas personalizadas para el cliente.
«Las marcas podrían ser creativas e invitar a los clientes a diseñar botellas con su nombre, o en el color que prefieran», dijo.
Defruyt señala que las cosas solo comenzarán a cambiar si enormes conglomerados de bienes de consumo empaquetados, como Johnson & Johnson y Proctor & Gamble, comienzan a hacer de la sostenibilidad una prioridad más importante.
Ambas marcas parecen estar abiertas a soluciones sostenibles, ya que forman parte de un grupo de compañías que participan en un programa piloto llamado Loop que enviaría botellas reutilizables a los clientes, que se enviarían para ser limpiadas y rellenadas.
Pero para reducir la contaminación de plástico y carbono, debemos desarrollar una gama de soluciones y ejecutarlas rápidamente.
También es importante convencer a los consumidores de que un sistema más sostenible puede ser más conveniente.
Por ejemplo, comprar productos en forma de tableta significa no tener que cargar botellas grandes de artículos de limpieza en el hogar de la tienda de comestibles, o tener cajas grandes enviadas a su hogar.
Las botellas reutilizables también son generalmente de mejor calidad, ya que las marcas a menudo invierten más en la creación de productos que tienen un uso a largo plazo.
Fuente: ExpokNews
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